Angélica Beltrán
Ciudad de México a 19 de febrero de 2018.- Aunque no pertenece al grupo de los 40 diputados del PRI en rebelión, que solicitaron hace unos días la salida del presidente nacional del partido, Enrique Ochoa Reza, el diputado federal de Durango, Oscar García Barrón expresó que las decisiones cupulares que se han tomado en el CEN del PRI han lastimado a la sociedad; y sobre todo a la militancia, porque no se ha reconocido el trabajo y trayectoria de los priistas.
Incluso la elección del candidato presidencial “ciudadano” no fue del agrado de la militancia, pues habiendo tantos priistas en la fila, no se les tomó en cuenta, y la decisión se tomó sin opinión de las bases, refirió.
De ahí que no es casualidad que el PRI con José Antonio Meade como su candidato presidencial esté en la última posición de las preferencias electorales, refirió en entrevista el diputado durante la sesión ordinaria del pasado jueves en San Lázaro.
En tanto, el diputado que coordina la bancada del PRI-Durango rechazó opinar sobre la salida de su compañero de bancada Otniel García Navarro, quien la semana pasada se unió al partido de Morena. Y se limitó a decir que respetaba la decisión del legislador duranguense, pues “sus razones tendría”.
Además, García Barrón reconoció que el “Nuevo PRI” se ha alejado de las causas sociales, y también de las bases del partido, por lo que no es casual que no haya logrado remontar en la precampaña.
Sin embargo, dijo tener esperanza de que la situación para el partido mejore con el esfuerzo de los priistas como él, que trabajarán en tierra en busca del voto.
No obstante, admitió que el Partido Revolucionario Institucional, el que hizo las instituciones, el que fue cercano a la gente y tenía un compromiso social, no es el que hoy está en contienda.
En ese sentido hizo hincapié en que las decisiones que se han tomado en el partido son cupulares y eso ha lastimado a la sociedad y a la militancia, y esa es la causa de que el PRI haya quedado en el último lugar de las encuestas.
Aunque consideró que el trabajo de los priistas de a pie podrían lograr el repunte del partido en las próximas elecciones.
Eso sí, puntualizó, él no se irá de PRI, se quedará a trabajar en su distrito, con o sin el permiso de la presidencia nacional del partido.